Si estás hecho un manojo de nervios por tu primera cita, relájate. Repite frente al espejo que eres un campeón y checa estos consejos. ¡Creémos en ti!
El corazón está a punto de salirse del pecho, sientes que sudas como si estuvieras en Acapulco y además tu cerebro funciona de forma inexplicablemente incoherente. Esta y otras sensaciones son las que se experimentan minutos antes de tener una primera cita, es algo normal. Por más confianza que exista los nervios están latentes. Y el hecho de que tu cita sea a distancia no lo hace menos complicado. Te contaremos unos cuantos secretos que te ayudarán a arrasar en tu salida con ese roomie que te tiene soñando despierto.
Haz un manual de sus gustos para la primera cita
Incomodidad es preguntarle a esa persona: ¿Qué quieres hacer? Y que te responda: “lo que tú quieras”. Es como cuando no sabes si cortar el cable rojo o verde para desconectar una bomba. Por eso, antes de fijar la primera cita de manera formal, a través de las diferentes pláticas por WhatsApp o desde su perfil de Facebook indaga lo que le gusta, su comida favorita, planes predilectos y sorpréndela. No es buen momento para improvisar, probablemente no saldrá bien.
Un encuentro virtual a todo dar
La tecnología te abre las posibilidades de que tu primera cita sea virtual, que a través de diferentes aplicaciones puedas tener una interacción que haga más amena la ocasión. Algunas apps como Houseparty vienen con juegos incluidos, filtros, emojis y un chat. Las ventajas de las videollamadas es que tú te sientes tranquilo, confiado y la conversación es fluida. También, échale un ojo a estas actividades que pueden hacer a distancia.
Rituales “pre-cita”
Si eres de los que ama tener barba, lávala bien y arréglala de forma que se vea agradable. Igualmente, si el maquillaje es tu gema del poder para resaltar tu belleza, confía en ti, no te coloques nada en exceso para lucir lo más natural posible.
Si se verán en persona con Susana Distancia, elige una fragancia sutil para que quede derretido(a) de amor.
¿Qué ponerse? Independientemente de si es algo formal o informal, la comodidad es clave: no lleves una camisa hiper ajustada que te haga parecer un pingüino o los tacones de Lady Gaga que te hacen perder el equilibrio, el confort es el paso número 1.
Prepárate para romper el hielo
Una de las mayores preocupaciones antes de una primera cita es: ¿Qué hago ante un silencio incómodo? o ¿Cómo inicio la conversación? Lo primero que debes hacer es sonreír, acude a los halagos o hazle saber lo bien que la estás pasando. Pregúntale qué tal estuvo su semana y cuéntale alguna anécdota graciosa.
PROHIBIDO: Platicar de religión, salud pública, política o de tus ex parejas, este es un terreno minado del cual puedes salir muy mal librado. Tampoco hables demasiado de ti, esto te haría quedar como una persona egocéntrica. Deja que el momento fluya y evita plantear preguntas cerradas.
El exceso de alcohol es perjudicial para conquistar
Ir a tomarse un par de copas es válido, pero manteniendo un límite. Mide tu nivel de aguante y pide algo suave con un snack para hacer más agradable el momento. Bebe despacio, es aconsejable que cenen antes de optar por el plan de unas “chelas frías”, de forma en que la cita no se enfoque única y exclusivamente en consumir bebidas alcohólicas. Si se quedaran en casa, prueben estos cocteles.
El arte del lenguaje corporal
La comunicación no verbal también es importante, a veces los gestos que haces con las manos o la forma en que te sientes habla más que un largo discurso. Evita ciertos ademanes como cruzar los brazos o acostarte en la silla. Ver siempre a los ojos transmite seguridad, pero no tan fijamente porque tu cita podría salir espantada. Mira en dirección general de su rostro.
¡Tú puedes!
La primera cita, sin duda, es la más difícil de todas, ya que la expectativa es muy grande con esa persona que tanto te atrae. Sea virtual o presencial, siéntete seguro de tus acciones y sigue nuestras recomendaciones para que tengas éxito.